*.- Delitos quedan impunes; sufren 20 mil secuestros y seis de cada diez mujeres son violadas.
Autor: Rafael Victorio Ruiz
TAPACHULA, Chiapas.- A pesar de que en el país no existe un registro ni información oficial sobre los abusos en contra de los migrantes que cruzan territorio mexicano en busca de llegar a los Estados Unidos, se calcula que anualmente unos 20 mil son víctimas de secuestro y seis de cada diez mujeres que llegan a los albergues sufren de violación sexual.
Es un panorama grave por la situación de impunidad prevaleciente, tanto que las agresiones hacia ese sector de alta vulnerabilidad no solamente las cometen integrantes de organizaciones delincuenciales o del crimen organizado, sino también por parte de autoridades municipales, estatales y ferales, incluidos el Instituto Nacional de Migración (INM).
El director adjunto de Amnistía Internacional (AI), Alberto Herrera Aragón, lamentó la existencia de una “amplia brecha” entre las instituciones y el paso de migrantes, ya que no existe un seguimiento de las denuncias de ataques, robos, asaltos, violaciones, secuestros y asesinatos, es más, cuando alguna dependencia inicia alguna investigación éstas se estancan porque los agraviados tuvieron que regresar a su país o siguieron su camino hacia el norte al no haber garantías de estancia para ellos.
Al término de la primera etapa de la campaña sobre la protección de migrantes denominada “No más Víctimas Invisibles” que incluye una exposición fotográfica y la presentación de cuatro documentales de la serie “Los Invisibles”, grabados en la frontera sur, Oaxaca y Tabasco, estados donde se comete el mayor número de agresiones hacia los “sin papeles”, insistió en que los programas de información para la protección de ellos instrumentados por las autoridades no han funcionado.
“Ninguno de los cientos de migrantes entrevistados contaba con información sobre los riesgos que enfrenta al pasar el país, por tanto no hay resultados ni impactos reales, por el contrario se incrementan las quejas de detenciones arbitrarias y secuestros en los que participan integrantes de corporaciones policíacas y del propio INM”, sostuvo.
AFECTA EL NARCO
En conferencia de prensa, Herrera Aragón, quien estuvo acompañado de la representante del Centro de Derechos Humanos “Fray Matías de Córdova”, Melissa Vertiz, señaló que en el fenómeno persiste el “círculo vicioso de la impunidad”.
Esta situación se ha agravado en el marco de “la guerra contra el narcotráfico” implementada por el gobierno federal, en donde los migrantes también resultan afectados al quedar en medio de dos fuegos.
Y es que miembros de la delincuencia organizada reclutan a los “sin papeles” para integrarlos a sus filas y por el otro, las autoridades no hacen nada para protegerlos.
“La masacre de 72 migrantes en Tamaulipas fue lo que detonó para que se tomara el tema y se exija al gobierno emprender acciones para proteger a este grupo de alta vulnerabilidad”, reiteró.
“Los migrantes quedan atrapados en la violencia, por tanto no se pueden apartar del tema de seguridad pública”, dijo al tiempo de mencionar que el gobierno federal ha iniciado apenas con un plan de acción de protección hacia ellos firmando convenios de coordinación con algunos estados, entre ellos Chiapas y Tabasco, pero “ojalá que no se quede solamente en letras sobre papel”.
SEGUIMIENTO
Paralelamente, Herrera Aragón, dijo que Amnistía Internacional está dando seguimiento a diversos casos relacionados con violaciones a derechos humanos de civiles mexicanos afectados precisamente por la “guerra contra el narcotráfico”
Mencionó que hay casos de agresiones cometidas por elementos del Ejército y Armada de México, motivo por el cual se están haciendo recomendaciones para que se elimine el fuero militar en casos de abusos en contra de civiles.
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